La caricatura en Colombia a partir de la independencia

Curaduría
Beatríz González Aranda

Casa Republicana

diciembre 2
2009

junio 15
2010

El fenómeno Ricardo Rendón

Por Beatriz González Aranda

Ricardo Rendón hizo historia en la gráfica crítica. Ha sido uno de los más reconocidos caricaturistas colombianos, además de ilustrador, editorialista gráfico de la prensa y dibujante de propaganda comercial. Su desarrollo se inició en el círculo de los Panidas en Medellín y culminó en El Tiempo, de Bogotá, con su prematura y trágica muerte. El Espectador, La República y El Tiempo fueron en realidad los soportes de la obra crítica de Rendón, quien plasmó la situación del país desde la mirada liberal hacia lo que se ha denominado la Hegemonía conservadora.

Se puede asegurar que para el desarrollo del estilo de Rendón, fue determinante la influencia del arquitecto y dibujante Pepe Mexía. La definición de caricatura en la revista Panida nº 6, de Medellín, bajo su dirección, marcó la estética de Ricardo Rendón: “Un rasgo que sintetiza un estado de alma, un momento sicológico encarnado en un capricho del lápiz, un esfuerzo cerebral, la ligereza de la mano unida al trabajo perspicaz y profundo de los ojos [...]”30.

El periplo vital de Rendón se determina así:
De 1894 a 1911 en Rionegro (Antioquia): 17 años
De 1911 a 1918 en Medellín: 7 años
De 1918 a 1931 en Bogotá: 13 años
Total: 37 años31.

Rendón fue editorialista gráfico en tres periódicos: El Espectador (1918-1920) (1924-1927), La República (1921-1924), El Tiempo (1927-1931); y durante seis períodos presidenciales: Concha, Suárez, Holguín, Ospina, Abadía y Olaya.

“Ricardo Rendón nació en Rionegro (Antioquia), el 11 de junio de 1894. Fueron sus padres Don Ricardo A. Rendón de profesión calígrafo y Doña Julia Bravo […]. Rendón cursó estudios básicos en su ciudad natal y a causa de sus notorias habilidades artísticas su familia se trasladó a Medellín, y se instaló en el barrio Buenos Aires, cerca de la Puerta Inglesa. Durante algunos meses recibió clases de dibujo en el taller del maestro Francisco A. Cano, al lado de los Vieco, los Carvajal, Humberto Chaves y José Restrepo Rivera”32.

En Medellín pronto llegó a ser un artista reconocido y se forjó durante seis años una trayectoria como caricaturista e ilustrador. A su llegada a la capital continuó con la elaboración de una serie de láminas iniciada en Medellín, coloreadas a mano, denominada “Jardín Zoológico”.

Rendón en Bogotá

Se inició en Bogotá Cómico, Cromos y El Espectador, de donde fue conquistado por Alfonso Villegas Restrepo cuando fundó La República, diario de la mañana que circuló entre 1921 y 1924. Su propietario luchó por medio de la caricatura de Rendón para mostrar su posición contra El Espectador y El Tiempo.

Los temas de las caricaturas, desde el punto de vista del liberalismo, eran la contienda política en el conservatismo y el final abrupto del Gobierno de Marco Fidel Suárez. El candidato a la presidencia, Alfredo Vásquez Cobo, director del periódico La Orientación, aparece montado de espaldas en el caballo de la opinión pública y en dirección opuesta a la meta de la presidencia.

El primer designado, Jorge Holguín, reflexiona como Hamlet al tomar posesión de la presidencia. Es la culminación de todos los pactos e intrigas que antecedieron a la decisión de Suárez —quien aparece en la gráfica como una calavera— al dejar el poder. Sin embargo, Rendón ve al propio Partido Liberal sin cabeza, como un muñeco articulado por el socialismo, los republicanos, los radicales y abstencionistas en “La Reintegración”.

El Tiempo lo adoptó a partir de 1828, hasta su muerte. Los blancos de sus gráficas críticas fueron los presidentes Pedro Nel Ospina y Miguel Abadía Méndez. Los temas más importantes en ese periódico fueron las candidaturas políticas, en particular el enfrentamiento entre Alfredo Vásquez Cobo y Guillermo Valencia, la intervención del clero en política, la matanza de las bananeras y las ‘roscas’ alrededor de la alcaldía de Bogotá.

En 1928, Eduardo Santos editó dos álbumes con una selección de sus gráficas críticas. Era la primera vez en la historia de la caricatura en Colombia que se le imprimía un álbum a un caricaturista. Gustavo Santos, en la introducción, compara la tarea del escritor de periódicos colombianos con la obra de Rendón: “Si hoy un cataclismo hiciera desaparecer las toneladas de papel de imprenta que en los diez últimos años se han impreso en las rotativas de todos los diarios de Colombia, la historia política y social quedaría intacta y transparente para la posteridad, en las doscientas páginas de este álbum”.

Rendón fue principalmente un retratista. Según sus contemporáneos, sus retratos se adherían de tal modo al rostro de las víctimas que las convertía en sátiras vivientes. Fue un iconógrafo: creó imágenes para que permanecieran gracias a su poder de síntesis y reemplazaran a las reales o a otras dadas por distintas técnicas y artes. La opinión, el pueblo y la “res-pública” varían de aspecto según el tratamiento del tema.

“Era feliz cautivo en Bogotá”33

La vida de Rendón, y al parecer su muerte, dependió de los periódicos. Por medio de su arte logró que la caricatura fuera reconocida, aceptada, que tuviera “estatus”, y ese fue en gran parte su mérito. Se han hecho numerosos estudios sobre las causas que lo condujeron al suicidio: su estado de salud, se habla de alcoholismo, de ciclotimia, de decepción del Gobierno liberal de Enrique Olaya Herrera. Su figura ha pasado por la pluma de innumerables escritores y todos coinciden: “Era de cuerpo magro, siempre vestido de negro, la cara pálida cuidadosamente rasurada, chambergo de alas no muy anchas, ojos pequeños de mirada inquisidora y labios apretados de satírico”34.

30. Panida, Medellín, n° 6, 25 de mayo de 1915.

31. Adolfo León Gómez, “Noticia biográfica”, en: Autores varios, Rendón, Medellín, Editorial Colina, 1976, p. 21.

32. Miguel Escobar, “Ricardo Rendón, una ausencia temprana”, en: Catálogo de publicaciones 1994, Gobernación de Antioquia, Medellín, Secretaría de Educación y Cultura, 1994, p. 21.

33. Adel López Gómez, “Anecdotario de la literatura Ricardo Rendón en cifras”, en: Autores varios, Rendón, Medellín, Editorial Colina, 1976, p. 45.

34. Ibíd.