La caricatura en Colombia a partir de la independencia

Jaime Garzón: Un impertinente de leyenda

Por Beatriz González Aranda

Como una respuesta al ‘estado de humor’ florecieron propuestas distintas a la tinta y el papel. El 31 de octubre de 1990 salió al aire el primer episodio del programa de televisión Zoociedad. Desde ese momento, Jaime Garzón “comenzó a transformarse en una leyenda viviente”¹¹⁶. Con Zoociedad los políticos aprendieron a ser tolerantes con las sátiras, convencidos de que “es mejor ser caricaturizado, porque es peor no serlo”. Zoociedad abrió la puerta al arte de la imitación de personajes reales y así surgieron La Luciérnaga, Sábados Felices, La Tele y El siguiente programa¹¹⁷.

Quac se inició a comienzos de 1995 con un formato de parodia de noticiero y los presentadores escogidos fueron Jaime Garzón, en el papel de Jaimito, y Diego León Hoyos, como María Leona Santo Domingo. […] Se consolidó en un momento muy convulsionado: el del Proceso 8.000, que polarizó a Colombia. El 13 de agosto de 1999 asesinaron a Jaime Garzón. Parte importante del imaginario de un país se sentía reflejado y representado por sus personajes, en particular por Heriberto de la Calle, el embolador impertinente que entrevistaba, y de paso desnudaba, a los poderosos¹¹⁸.

Entre las propuestas de humor en la década final del siglo XX se encuentra “La Luciérnaga”, fundada en 1992 por Caracol Radio. Se trata de un programa creado en el marco de un apagón obligado por una crisis de energía. Nació casi simultáneamente con las ingeniosas creaciones en la televisión y se ha prolongado hasta el presente, sobreviviendo al “apagón”, convertido en un programa de opinión.