"UNO NO ES RÍO PARA NO DEVOLVERSE"
Al cerrar la llave mientras nos cepillamos los dientes, o al botar basura en los ríos, estamos afectando las cuencas y a las personas que las habitan. Es nuestra elección decidir cómo queremos influir en el entorno: en forma positiva o negativa.
En este epílogo hallará información sobre buenas prácticas, lugares para encontrar información e ideas locales e internacionales. La nueva cultura del agua requiere, ante todo, que pensemos en el planeta y actuemos en el ámbito local.
"CON EL AGUA HASTA EL CUELLO"
Las temporadas de lluvia y de sequía son fenómenos naturales. Sin embargo, la sociedad es más vulnerable a los efectos negativos como inundaciones y escasez de agua, en gran parte debido al desconocimiento de estos ciclos de la naturaleza y a los intentos por imponerse sobre ella. Por esto, es necesario aprender a adaptarse y aprovechar lo que nos brinda.
"AGUA QUE NO HAS DE BEBER, NO LA DEJES PERDER"
Hay que generar una nueva manera de relacionarnos con el agua, expresa el español Javier Martínez Gil, catedrático de la hidrogeología y fundador de la Nueva Cultura del Agua: "Los principios básicos para una nueva cultura del agua son: gestionar el agua como recurso y conservarla como patrimonio: Gestionar el agua con políticas de control de la demanda y no de aumento de la oferta".
En la página web del Proyecto cultural del Agua www.banrepcultural.org/agua encontrará varios enlaces de interés en los que podrá conocer iniciativas exitosas para la generación de una nueva cultura del agua.