Medios y modos de viaje1873-04-10Suaza, Huila, ColombiaTomo IX
Después de pasar ambas quebradas, empezamos a subir otra cuesta más pendiente y áspera que las anteriores, la cual va a confundirse con las cumbres más elevadas, que por aquella parte ostenta la serranía, y es por consiguiente el lomo de la cordillera. Denomínase este lugar el Paramito, por ir a terminar, como hemos dicho antes, en el punto más frío de la montaña. La cuesta se divide en siete ásperas y rudas pendientes, con una quiebra o meseta al final de cada sección, donde podíamos tomar algún descanso. Increíbles fatigas nos costaba subir cada una de estas secciones, a cuyo extremo llegábamos siempre cubiertos de sudor, angustiados y jadeantes. Por distraer algo el cansancio, comparamos desde un principio aquellas siete secciones con los siete pecados capitales, que tan difíciles son de dominar a la flaca y débil naturaleza humana; y divertidos con las ocurrencias que de la comparación surgían, fuimos haciendo más llevaderos nuestros trabajos y penalidades.
Increíbles fatigas nos costaba subir cada una de estas secciones, a cuyo extremo llegábamos siempre cubiertos de sudor, angustiados y jadeantes.